Pepe se pregunta por qué narices le duele tanto la muela. Y ya puestos por qué hay que ir al dentista, que no mola nada; o por qué existe el dolor. ¡Vaya rollo!
Artículos relacionados
Otros libros del autor
Vista previa: PEPE PIENSA... ¡AY, QUÉ DAÑO!
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Más información o cambiar la configuración.